El vermicompostaje es una forma natural, económica y efectiva de transformar residuos orgánicos en abono de altísima calidad. En esta nota, te contamos cómo criar lombrices y producir compost para mejorar tu cultivo cannábico y cuidar el planeta al mismo tiempo 🌳
Si cultivás cannabis en casa, ya sabés que el sustrato es clave. Y si querés llevar tu cultivo al siguiente nivel, el compost con lombrices —también conocido como humus de lombriz o vermicompost— es uno de los mejores aliados. Rico en microorganismos, aireado, lleno de nutrientes y 100 % natural, este abono mejora la salud de tus plantas desde la raíz.
Además, el vermicompostaje es una forma simple de reducir tus residuos orgánicos y devolverle vida al suelo. Te conectás con el ciclo natural, ahorrás dinero y cultivás con conciencia ecológica. ¿Qué más se puede pedir?
🪱 ¿Qué es el compost con lombrices?
Es un proceso donde lombrices rojas californianas (las más recomendadas para compostaje doméstico) se alimentan de restos orgánicos y los transforman en un material rico en nutrientes y microorganismos beneficiosos.
El resultado es un abono oscuro, esponjoso y sin olor desagradable, ideal para usar en tus macetas o mezclado en el sustrato.
🧪 Beneficios del humus de lombriz en cultivos de cannabis
- Mejora la estructura del suelo: retiene agua pero permite buen drenaje.
- Aporta microorganismos vivos que fortalecen la microbiología del sustrato.
- Nutre a las plantas de forma equilibrada y sin riesgo de sobrefertilización.
- Reduce el estrés en trasplantes y mejora la absorción de nutrientes.
- No quema raíces ni contamina, ideal para cultivos orgánicos o medicinales.
🧰 ¿Qué necesitás para empezar?
- Lombrices rojas californianas (Eisenia foetida)
- Un recipiente o vermicompostera (puede ser un tacho, caja plástica, cajón de madera o un sistema casero de bandejas)
- Cartón o papel sin tinta para la base
- Restos orgánicos (vegetales, frutas, cáscaras, etc.)
- Un lugar con sombra y temperatura estable (entre 15 °C y 25 °C)
🛠️ Paso a paso para hacer compost con lombrices
- Prepará la base del contenedor con cartón húmedo y desmenuzado. Eso sirve como cama inicial para las lombrices.
- Agregá una capa fina de restos orgánicos: cáscaras de frutas, verduras, yerba usada, té, pan seco (nunca cítricos, ajo, cebolla ni carne).
- Colocá las lombrices sobre esa capa y cubrilo todo con un poco de cartón o papel húmedo.
- Mantené la humedad como si fuera una esponja escurrida. Si está muy seco, rociá con agua. Si está muy mojado, agregá papel seco.
- Agregá restos una vez por semana, siempre en pequeñas cantidades. Cubrí con cartón o tierra para evitar mosquitas.
- Cada 2 o 3 meses, cosechá el humus: notarás que el material se volvió oscuro, fino y sin rastros de comida. Separalo con cuidado de las lombrices.
💡 Tips útiles
- Evitá olores fuertes: si huele mal, es señal de exceso de humedad o mala aireación.
- No sobrealimentes: las lombrices prefieren que les agregues de a poco.
- En verano, cuidalas del calor directo. En invierno, mantenelas en un lugar protegido.
- Si usás café o yerba mate, alternalo con restos más suaves (como cáscaras de banana o zanahoria).
- Si te vas de viaje, no pasa nada: las lombrices pueden sobrevivir varias semanas sin comida, mientras haya humedad.
🌳 Un paso más hacia un cultivo sostenible
El vermicompost no solo mejora tus plantas: cierra el ciclo de lo que consumís, reduce residuos y transforma tu cultivo en un sistema más autosuficiente. Además, es una forma hermosa de reconectarse con los procesos naturales, incluso en departamentos o patios pequeños.
Y si usás cannabis con fines medicinales, tener un abono natural y libre de químicos puede marcar una gran diferencia en la calidad final de tus flores 🌿