El microdosing con cannabis es una práctica cada vez más popular que busca aprovechar los beneficios de la planta sin generar efectos psicoactivos intensos. En este artículo te explicamos en qué consiste, para qué sirve y cómo encontrar tu dosis ideal.
En los últimos años, el concepto de microdosing (o microdosificación) dejó de ser exclusivo del mundo de los psicodélicos y empezó a ganar terreno también en el universo del cannabis. ¿La idea? Utilizar dosis muy bajas de cannabinoides para obtener beneficios terapéuticos sin alterar la conciencia.
Aunque suene contradictorio, muchas personas consumen cannabis justamente para no «colocarse», sino para mejorar su calidad de vida con efectos suaves y sostenidos a lo largo del día. En esta nota, te contamos qué es el microdosing con cannabis, cómo se aplica y por qué tanta gente lo elige.
🌿 ¿Qué es el microdosing con cannabis?
El microdosing es el uso de dosis mínimas de una sustancia psicoactiva para alcanzar efectos sutiles, que no interfieran con las actividades cotidianas. En el caso del cannabis, esto significa consumir pequeñas cantidades de THC, CBD o ambos, de forma controlada y regular, con fines funcionales o terapéuticos.
El objetivo no es el high, sino mejorar el ánimo, reducir el estrés, aliviar dolores crónicos o mejorar la concentración, entre otros efectos posibles.
💊 ¿Para qué sirve?
Las razones por las cuales algunas personas eligen microdosear cannabis son variadas, pero entre las más comunes se encuentran:
- Reducción de ansiedad o estrés sin sedación
- Mejora del foco y la productividad
- Alivio de dolores leves o molestias crónicas
- Mejor descanso nocturno (cuando se microdosea al atardecer)
- Manejo del ánimo en contextos de depresión leve o irritabilidad
A diferencia del consumo recreativo o medicinal tradicional, el microdosing no interfiere en la rutina diaria y permite mantener la funcionalidad plena.
⚖️ ¿Cómo se aplica?
La clave del microdosing es encontrar la dosis mínima efectiva. Es decir, la cantidad más baja que genera el efecto buscado sin generar alteraciones perceptibles. Esto puede variar mucho de una persona a otra, por eso se recomienda ir de menos a más, con paciencia y atención.
➤ Métodos comunes:
- Aceites sublinguales (tinturas): permiten controlar la dosis gota a gota.
- Comestibles (edibles): siempre que estén correctamente dosificados (por ejemplo, 2 mg de THC).
- Vapeo con cartuchos dosificados: aunque menos preciso, permite dosificar con una o dos inhalaciones suaves.
➤ ¿Cuánto es una microdosis?
Aunque no hay una cantidad universal, suele considerarse microdosis:
- THC: entre 1 mg y 2,5 mg por dosis
- CBD: entre 5 mg y 10 mg por dosis (el CBD no es psicoactivo, por eso las dosis suelen ser mayores)
🧭 Cómo encontrar tu dosis ideal
- Empezá sin nada: Si nunca microdoseaste, probá uno o dos días sin consumir nada para ver cómo te sentís naturalmente.
- Iniciá con la dosis más baja: Por ejemplo, 1 mg de THC o 5 mg de CBD.
- Anotá todo: Cómo dormiste, cómo fue tu humor, tu nivel de foco, tu apetito, tu ansiedad…
- Ajustá lentamente: Si no sentís ningún cambio, aumentá muy levemente. Si sentís que te «pegó», bajá.
Este proceso puede llevar varios días, pero vale la pena. Una vez encontrada tu microdosis ideal, podés usarla en situaciones específicas o mantener una rutina diaria, siempre respetando los descansos.
🚫 Precauciones y consideraciones
- No todo el mundo necesita microdosear: si no tenés un objetivo claro, quizás no lo necesites.
- No es recomendable combinar con alcohol u otras sustancias.
- En contextos legales regulados, asegurate de que el producto esté correctamente etiquetado.
- Si estás en tratamiento médico, consultá con un profesional de la salud antes de empezar.
🌳 Microdosis, grandes cambios
Lo más interesante del microdosing es que una pequeña cantidad puede generar grandes diferencias, tanto en lo físico como en lo emocional. Para quienes buscan un enfoque funcional, discreto y responsable del uso de cannabis, esta práctica representa una opción cada vez más valorada.
Como siempre, la clave está en informarse, observarse y escuchar al cuerpo. El cannabis puede ser una herramienta poderosa, incluso en dosis que ni se sienten 🌿